Empresa Eléctrica Puntilla -controlada en un 59,77% por la Asociación de Canalistas Sociedad del Canal de Maipo- observa con ojos de cautela el panorama para el sector eléctrico.
Y es que como desarrolladores de hidroeléctricas, ven dificultades para concretar proyectos tanto por razones sociológicas como de mercado. Esto último, por la caída de la demanda y las señales de precios a la baja que se han divisado en el sector.
Esto ha producido que la empresa dirigida por Alejandro Gómez opte por disminuir la velocidad de construcción de su proyecto más ambicioso: central Ñuble (136 MW). La iniciativa ha sufrido sobrecostos y el término anticipado de un contrato clave de construcción, por lo que ahora el término se proyecta para 2022, cinco año después de su plazo inicial.
¿Cómo están viendo el sector eléctrico?
-Desde el punto de vista hidroeléctrico, bastante complicado. Las exigencias medioambientales si bien son iguales para todos, han hecho que las inversiones del sector hidro sean mayores. Hay bastante oposición debido al impacto que tienen sobre la comunidad, dependiendo del tamaño obviamente, pero hay bastante oposición y una oposición que tiene su origen en lo que pasa durante el periodo de construcción, no durante la operación.
Desde el punto de vista de las hidroeléctricas mayores, es una temporada difícil. Los grandes proyectos hídricos que hay en este minuto, entre ellos Ñuble, están todos detenidos o en proceso de construcción muy lento, esperando una visión de precios un poco más estable. En este minuto la oferta de renovables es muy grande, pero también está el tema que la demanda está muy baja, porque todos los proyectos mineros están detenidos. Hoy con el aumento del precio del cobre están volviendo a asomar su cabeza a ver si se relanza o no, y si es así será un escenario distinto de demanda y eso podría llevar también un escenario distinto de precios. Vamos a ver qué pasa en los próximos dos o tres años.
¿Puntilla se moverá al mundo renovable no convencional?
-Es una idea. Nosotros ya somos renovables, y sí estamos mirando y hemos mirado en el pasado otras tecnologías como biogás, solar. Tenemos un pequeño proyecto solar que estamos viendo en qué momento lo desarrollamos acá en Santiago.
La licitación eléctrica para abastecer clientes regulados tenía cláusulas para favorecer la tecnología hidráulica, al parecer no suscitó toda la atención que se esperaba.
-Uno puede especular que estaba hecha para las grandes hidráulicas que no tomaron demanda en la licitación pasada, ahora están participando Enel, Colbún, grandes hidráulicas; aunque lo que se está licitando es muy poco considerando el tamaño de ambas empresas, pero tienen que renovar inversiones de centrales que ya existen, volver a rentabilizarla y tener precios para mantener ese activo.
Puntilla no participó en la licitación, ¿consideraron que no era para ustedes?
-No teníamos energía disponible para licitar por 20 años, a los precios que estaban.
Respecto a la central Nuble, ¿Cuál será finalmente la inversión para ese proyecto?
-Son US$420 millones, pero la cifra final la vamos a tener cuando licitemos los dos grandes contratos. Aun no la hemos lanzado porque estamos a cinco años, del 2017 al 2022, por lo tanto nuestro período de construcción definitivo se debería iniciar para el 2019.
¿Han pensado en vender ese proyecto?
-Si hay alguien interesado, que pueda entregar una solución, un precio o una posible asociación, es posible.
¿Está el proyecto afectado por el mismo fenómeno de Alto Maipo? Al haberse puesto en marcha su construcción con otro mercado.
-Efectivamente era otro mercado, las proyecciones de precio que habían cuando nosotros evaluamos el proyecto y desarrollamos, hablaban de precios de US$80 MWh y los últimos precios que vimos en la última licitación son de US$47 MWh; entonces, indudablemente la diferencia de las rentabilidades de los proyectos en esas condiciones son muy distintas.
¿Cómo piensan hacer volar el proyecto si se pensó con otros precios?
-El proyecto vuela todavía. Esto porque las tasas de retorno que están exigiendo en las compañías a sus proyectos en este nuevo escenario del mercado eléctrico también son distintos.
Fuente: Pulso/Constanza Valenzuela