El mes pasado, el Colegio Médico de la Región Metropolitana hizo públicos los resultados de un estudio que demuestra la presencia de altas concentraciones de elementos tóxicos en las aguas de la cuenca del río Maipo, que abastece el 80% del agua potable de Santiago. Las muestras tomadas por el Colegio Medico y analizadas en los laboratorios del Centro Nacional de Medio Ambiente (CENMA) corresponden a aguas extraídas en fuentes cercanas a las faenas de excavación de los túneles del proyecto hidroeléctrico Alto Maipo.
Dicho informe revela que las muestras de agua presentan concentraciones de distintos metales y metaloides que afectan tanto el agua potable como el agua para riego, excediendo inquietantemente la normativa chilena y lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Las muestras analizadas por el Centro Nacional del Medio Ambiente (CENMA) establecen fehacientemente que los niveles de concentración de los metales pesados exceden las normas.
En el caso del hierro supera en 5.337% la norma chilena para agua potable y triplica lo autorizado para riego. Los niveles de manganeso exceden en 189% y en 145% la norma para agua potable y la norma de agua de riego. El molibdeno excede en 20% la norma de agua para riego.
Mientras el arsénico sobrepasa en un 5% la norma chilena para agua potable y supera en 170% los niveles de plomo para agua potable recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).Finalmentelos niveles de cadmio estan al límite máximo de lo admisible según la recomendación de la OMS.
Las perforaciones de túneles y el depósito del material extraído en diversos lugares de la cuenca del rio Maipo, por parte de la empresa, al tomar contacto con la atmósfera y el agua han producido una reacción química que genera drenajes ácidos que contaminan el agua de la cuenca del Maipo,como evidencian los resultados de la muestra.
Con alarma ante estos antecedentes, más de 500 habitantes del cajón del Maipo, junto a la organización Coordinadora Ríos del Maipo, presentaron un recurso de protección contra la empresa Sociedad Alto Maipo, que construye dichos túneles para su proyecto hidroeléctrico y también contra el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) que no estaría controlando la calidad del agua, condición que dicho servicio impuso al aprobar ambientalmente el proyecto en 2009.
El informe que dio origen al Recurso de Protección fue desarrolladopor médicos de la Comisión de Medio Ambiente del Colegio Médico y validado por la presidenta del Colegio Médico Región Metropolitana,doctora Izkia Siches. El gremio médico lo dio a conocer a la opinión pública dado la grave amenaza que significa para la salud de más de 6.000.000 de personas que habitan en la región Metropolitana.
Recordemos que el 80% del agua de Aguas Andinas que abastece de agua potable a Santiago además del agua que riega 120 mil hectáreas agrícolas de la cuenca, provienen del río Maipo.
Lo grave de la situación radica en que la exposición a los diversos contaminantes presentes en las aguas del Alto Maipo puede generar efectos nocivos a la salud de la población. El mismo informe del Colegio Médico destaca que la exposición a los metales pesados encontrados en concentraciones sobre la norma en las aguas del cajón del Maipo, pueden generar cáncer, malformaciones fetales, deprogramación celular, enfermedades cardiovasculares y neurotoxicidad dependiendo del tipo y prolongación de la exposición a estos contaminantes.
De acuerdo a estudios científicos, la exposición al plomo causa déficit del sistema nervioso central afectando la memoria, inteligencia, capacidad de atención y produce fracasos escolares, trastornos conductuales como hiperactividad y agresividad, entre otras conductas.
Mientras tanto la Organización Mundial de la Salud ha indicado que la exposición prolongada al arsénico puede causar distintos tipos de cáncer, entre ellos vejiga, pulmón, piel, riñón e hígado. Ambos tóxicos, plomo y arsénico, están presentes en las aguas que alimentan el Maipo y que exceden por amplio margen tanto la norma chilena, como la recomendación de la OMS.
Las faenas para la construcción del proyecto Alto Maipo, en particular la roca molida procedente de los túneles y depositados en diversos lugares sin impermeabilización ninguna, ya está contaminando esteros y ríos próximos a dichos túneles. La situación es gravísima, pues las excavaciones están recién empezando (la empresa informa un 27% de avance) y ningún servicio público está fiscalizando.
Este impacto fue advertido durante la evaluación ambiental del proyecto, cuyo informe señala que aparece tanto la Seremi de Salud, como la de Agricultura, demandaron evaluar la posibilidad de drenajes ácidos, desde los 14 depósitos de material de descarte (unos 2.000.000 metros cúbicos) que contempla el proyecto, sin impermeabilización alguna. La situación es alarmante, porque la contaminación ya ha quedado en evidencia al inicio de las excavaciones, y el proyecto contempla excavar 70 kilómetros de túneles.
Ante esta evidencia, ¿porqué las autoridades de gobierno no actuan y previenen mayores impactos sobre las aguas y la la salud de la población?
¿Se continuará ignorando estas amenazas tal como ocurrió con los niños contaminados por plomo en Arica, la población expuesta a metales pesados en Antofagasta, y ahora la amenaza declarada de metales pesados en las aguas del Maipo por un proyecto que recién se construye?
¿Se estará configurando un nuevo tipo de “colusión” en Chile, entre la empresa que contamina y el gobierno que hace la vista gorda y no fiscaliza la norma destinada a proteger a la gente?
La Superintendencia de Medio Ambiente ha recibido decenas de denuncias por impactos de este proyecto en los últimos años y no ha emanado ninguna respuesta.
El proyecto Alto Maipo ha tenido insolvencias desde su génesis al comenzar las faenas sin tener todos los permisos correspondientes, al ser aprobado de forma irregular con errores y omisiones graves, como lo demuestra el informe de la Comisión Investigadora de la Cámara de Diputados).
Entre estos destacan la realización de faenas no aprobadas en la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) como talar especies protegidas por ley, realizar tendidos eléctricos no aprobados, usar derechos de agua ajenos, cambiar la ubicación de los campamentos a lugares no evaluados, instalar campamentos en centros poblados a pesar de la prohibición expresa en la RCA, realizar tronaduras en horarios no permitidos en la RCA, entre otros, y ahora contaminar las aguas que abastecen de agua potable a 6 millones de personas en Santiago y riegan 120 mil hectáreas agrícolas de las más productivas del país.
Captar aguas desde el nacimiento en los ríos Volcán, Yeso y Colorado y trasvasijarlas hacia 70 kilómetros más abajo ya es irresponsable pues degrada los 3 ríos y desertifica la cuenca del Maipo, afectando la seguridad hídrica de la Región Metropolitana; pero permitir la contaminación del agua potable y riego de la región más poblada del país con metales pesados, es insensato.
El caso de contaminación de las aguas en la cuenca del Maipo ya está en Tribunales, instancia que deberá velar por el derecho constitucional de los ciudadanos a vivir en un medio ambiente libre de contaminación, y con ello asegurar que el agua que beben los 6 millones de santiaguinos, no está, ni estará contaminada.
Publicada en Cooperativa