La internalización de la Campaña No Alto Maipo se inició en Estados Unidos, donde ya suman citas con instituciones financistas del proyecto hidroeléctrico, y organizaciones ambientales, dispuestas a apoyar la cruzada de defensa del Río Maipo.
En el marco de la gira por Estados Unidos que realizan desde la semana pasada, los dirigentes de No Alto Maipo, Marcela Mella y Tomás González, junto al presidente de Ecosistemas y director de International Rivers (IR), Juan Pablo Orrego se realizó una importante reunión con representantes del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y del Overseas Private Investment Corporation (OPIC).
En la oportunidad, siete representantes del BID, dentro de ellos, la jefa de la División de Medio Ambiente, Janine Ferreti, y el comunicador de la oficina de relaciones exteriores, John Ferriter, junto a los ejecutivos de CIEL, Jocelyn Medallo y Carla García, tomaron nota de los planteamientos de la comitiva chilena. El énfasis estuvo en la irresponsabilidad empresarial de continuar con un proyecto que afectaría irreversiblemente una de las cuenca más estratégicas de Chile, que provee de agua para consumo y riego del 90% de la población de la Región Metropolitana; denunciar el tráfico de influencias que ha permitido el avance de Alto Maipo, así como sus irregularidades técnicas, que incumplen los estándares de las instituciones financieras internacionales. Además de recalcar la fuerza del movimiento social y ambiental que rechaza categóricamente la intervención del río Maipo.
La reunión con BID y OPIC se debe a que parte del financiamiento obtenido por la empresa proponente, Aes Gener, fue estructurado bajo el alero de un sindicato de bancos multilaterales y comerciales, nacionales y extranjeros, integrado por Overseas Private Investment Corporation (OPIC), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), International Finance Corporation (IFC), Corpbanca, Banco de Crédito e Inversiones (BCI), Banco Itaú Chile, Banco del Estado de Chile, KfW Ipex-Bank GmbH y DNB Bank ASA.
International Rivers (IR) y Center of International Enviromental Law (CIEL) se han sumado a esta etapa de No Alto Maipo, abriendo con ello la oportunidad de amplificar los cuestionamientos al errático proyecto hidroeléctrico que busca intervenir la cuenca, poniendo en riesgo los servicios de agua potable de 6.000.000 de habitantes de Santiago, el riego de 120.000 hectáreas del Valle del Maipo, la regulación del clima y los planes de descontaminación de la ciudad, agravando además el derretimiento de los glaciares del área, entre otros.
La gira continúa durante esta semana y contempla reuniones con organismos internacionales, cuyos resultados se darán a conocer al regreso de la delegación a Chile.
Fuente: Ecosistemas