Es poco conocida por el gran público pero desde que se convirtió en asesora comunicacional de Piñera, Fernanda Otero ha ido acrecentando cuotas de poder y figuración en La Moneda. Algo que le ha granjeado disputas, roces y cuestionamientos. El principal: asesorar al mandatario y al mismo tiempo atender a empresas reguladas por organismos del Estado. El 26 de octubre de 2010 ambos clientes se cruzaron. Ese día el Jefe de Estado inauguró un complejo hidroeléctrico de US$ 800 millones en San Fernando y en el lugar se encontró con su asesora, la más cuestionada en el entorno piñerista.