Este jueves, el presidente Piñera anunció una inversión de 5 mil millones de dólares ante la crisis hídrica que enfrenta nuestro país, siendo uno de los principales objetivos garantizar que las comunidades más afectadas sigan teniendo acceso al agua para su consumo y necesidades básicas.
Luego de sostener una reunión con el ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, y su par de Agricultura, Antonio Walker, el presidente Sebastián Piñera se refirió al plan que su gobierno tiene para enfrentar la sequía que afecta a Chile y que tiene a 56 comunas con decreto de escasez hídrica y a 111 con emergencia agrícola.
El mandatario señaló que uno de los objetivos es trabajar en el riego tecnificado, para que este llegue a más lugares y así ayude en el ahorro del recurso. Además, informó que se hará una inversión de 5 mil millones de dólares para mejorar la capacidad de producción de agua.
“Nuestro Gobierno ha elaborado un plan de acción, de forma tal de hacer que Chile logre una normalidad en materia hídrica que le permita continuar con su desarrollo económico y que no afecte a las familias en su consumo de tan vital elemento como es el agua”, dijo el presidente.
Dentro de las medidas inmediatas se consideran el abastecimiento de agua a través de camiones aljibe, bombas, estanques, forraje para animales, medicamentos y otros requerimientos para superar la falta de agua. Además, se anunció que se realizan esfuerzos para conservar, ampliar y crear nuevos sistemas de agua potable rural para abastecer a las familias de esos sectores.
En su conferencia de prensa, el presidente Piñera se refirió también a las obras de infraestructura hídrica, como los embalses Valle Hermoso, ubicado en la Región de Coquimbo y que se inaugurará este año; Chironta, en Arica, que entrará en operaciones en 2021; y planes para otros 24 embalses, con una inversión de más de 6.000 millones de dólares.
Ante el anuncio, desde Greenpeace se pronunciaron al respecto. Su director, Matías Asun, indicó que “poco importará tener estas reservas hídricas o cualquier otra medida si es que nuestro modelo de desarrollo va a seguir favoreciendo la generación de gases de efecto invernadero que contribuyen al cambio climático. Por eso es que resulta clave una apuesta definitiva y ambiciosa por las energías renovables”.
Desde el Movimiento por el Agua y los Territorios (MAT), su vocera Francisca Fernández apuntó hacia la misma crítica, asegurando que, si bien el cambio climático es determinante en esta sequía, el actual Código de Aguas también ha sido un factor clave en el agotamiento del recurso, pues lo que hoy enfrenta el medio ambiente responde a las consecuencias de un modelo productivo capitalista.
“El gran ausente en este discurso es el causante en términos estructurales de la mega sequía: el Código de Aguas. En ningún momento Piñera hizo referencia al modelo de gestión de aguas existente en Chile, que es un modelo de gestión privatizado que ha generado un mercado de las aguas en que hoy la forma de adquirir el agua es a través de la compra de derechos de aprovechamiento de esta, generando algo muy relevante que es que las cuencas en Chile, sus derechos de agua, han sido sobre otorgados”, comentó.
Agregó que mientras el mandatario habla de normalización, para el MAT es importante hablar de “democratizar la gestión del agua a través de una gestión comunitaria, en que el primer precedente sea la derogación de este Código y ahí empezar a pensar un nuevo cuerpo normativo del agua“, en el que, según dijo, se debe considerar a las comunidades y localidades que se vinculan con la gestión de las aguas, y así poder trabajar en un nuevo modelo productivo.
De acuerdo a información entregada por Greenpeace, en 2040 Chile será uno de los 25 países del mundo con mayor situación de estrés hídrica, y enfrentará el mismo escenario de países africanos como Namibia o Botswana, por lo que aseguran que el agua debe convertirse a la brevedad en un tema de prioridad nacional.
Jueves 5 de septiembre de 2019.
Fuente: Diario U. de Chile.