“Es inaceptable que autoridades que representan al Estado, creado para defender el bien común, prefieran proteger a empresas altamente contaminantes que destruyen nuestro Valle, dando la espalda y abandonando a quienes aportamos a la economía, cuidando este territorio para hacerlo más fértil y sustentable”, señalaron desde las comunidades convocantes.
En Vallenar, capital provincial del Huasco, hubo una marcha que reunió más de un centenar de personas en el marco del Día Mundial por el Agua, la que representó a las cuatro comunas de la provincia: Alto del Carmen, Vallenar, Freirina y Huasco principalmente, además de agricultores, adherentes del país y el mundo quienes defienden y protegen la vida.
La marcha partió en la Plaza Ambrosio O’Higgins donde se reunieron y manifestaron a través de diálogos, declaraciones, carteles, pancartas, cantos, música, bailes y expresión, en un recorrido que pasó por la Gobernación Provincial y luego llenó de vibrante marcha a la central calle Prat.
Principalmente, el movimiento exigió la consagración del agua como bien común, frenar que siga siendo una mercancía y terminar con la contaminación y amenaza que está teniendo el recurso natural por los proyectos extractivistas y altamente contaminantes en el territorio.
Asimismo, exigieron que el agua “deje de estar privatizada”, situación que sólo ocurre en Chile -recordaron-, y expresando una fuerte oposición a todos los intentos de reformas al Código de Aguas, las cuales hasta ahora han sido ineficientes y ambiguas consagrando su privatización. También, rechazaron al TTP-11, el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica.
Tal como expresaron en el comunicado emitido por el Movimiento Socioambiental del Valle del Huasco, la marcha reivindica la defensa del agua “para resguardar la vida de los que hoy habitamos este territorio y por los que vienen. Lucharemos sin descanso por el resguardo de todos nuestros patrimonios culturales y naturales, nuestra identidad, además de nuestros ecosistemas”.
“Por el derecho a vivir en el territorio y el deber de defenderlo, para frenar las muertes por contaminación o por falta de agua pura y dejar de ser desterrados de nuestro valle por quienes destruyen en nombre del progreso, esta tierra que con tanto sudor mantuvieron nuestros antepasados y ancestros”, añadieron.
Asimismo, se pidió “con mucha fuerza la expulsión de todos los proyectos contaminantes que afectan de cordillera a mar el Valle del Huasco, como son la presencia de la termoeléctrica y la empresa minera CAP en el puerto de Huasco, afectando a toda la zona costera, y los impactos que provoca Agrosuper en Freirina a pesar de estar inactiva, porque invadió varias hectáreas adueñándose con permiso legal y de autoridades”.
A ellas se suma “la Mina Los Colorados de CAP en Vallenar, que mantiene a vecinos afectados por los materiales densos que emite constantemente; los daños irreparables en los glaciares y ecosistemas cometidos por Pascua Lama en la naciente de la cordillera; y las graves consecuencias de los monocultivos en el Valle, que han extraído cientos de litros de agua pura del río Huasco para exportar uva de mesa, en especial la empresa Campillay, impactando a la transversalidad del Valle”.
“A todos estos proyectos altamente contaminantes de la provincia del Huasco, hoy se le suma el minero Nueva Unión, que pretende intervenir desde cordillera a mar este fértil valle, por lo que fuerte y claro el mensaje es “¡Tu progreso es destrucción, Fuera Nueva Unión!”, además de aludir al actual alcalde de Vallenar; “¡Tapia, Nueva Unión la misma billetera, no vamos a dejar que nos saqueen nuestra tierra!”, porque es sabido que muchos eventos donde invita la Municipalidad, están siendo financiados por el proyecto Nueva Unión”, añadieron desde la organización.
La marcha también hizo una parada en las afueras de las oficinas de dicho proyecto y pegaron mensajes escritos por la comunidad, los que ilustraron el descontento y rechazo al desarrollo del proyecto subrayando: “El planeta muere y ustedes ayudan a la destrucción”, “no tienen licencia social”, “Nueva unión, la nueva destrucción” o “agricultores del Valle dice no a la Nueva Unión“.
Sin duda, fue un movimiento muy vibrante por las calles, y por la emisión de mensajes a través de manifestaciones artísticas y carteles que ayudaron a que familias, transeúntes y trabajadores en el centro de la comuna, puedan entender la realidad.
El movimiento también visibilizó y mensajeó a autoridades “para que dejen de ser irresponsables con el desarrollo y la dignidad de la ciudadanía, debido a que han aceptado, permitido y ayudado a que existan una serie de proyectos asesinos y contaminantes, además de la engañosa reforma al código de aguas que sólo consagra un robo porque Chile es el único país del mundo que sus aguas son privadas y el agua es un derecho humano”.
El movimiento además exhibió que “es inaceptable que autoridades que representan al Estado, creado para defender el bien común, prefieran proteger a empresas altamente contaminantes que destruyen nuestro Valle, dando la espalda y abandonando a quienes aportamos a la economía, cuidando este territorio para hacerlo más fértil y sustentable”.
En la marcha también hubo mensajes como “Vecino, vecina, un río se secó, que no nos pase lo de Copiapó” y “Vecino, vecina, salgan a marchar la megaminería nos va a contaminar”, aludiendo a la problemática de que en Copiapó, capital regional, ya fue impactado y contaminado el río, demostrando que la gran minería es también una gran muerte que es dinero para algunos y hambre eterno.
La manifestación continuó por la avenida Brasil, pasando por la emblemática Vendimia y el puente Brasil, donde automovilistas también adhirieron su apoyo a la marcha a través de bocinazos.
Todo finalizó con un evento artístico musical -con micrófono abierto- donde las personas reflexionaron y varios músicos apoyaron la defensa al Agua y la Vida. Bandas y artistas como Valle Reggae, Yastay, Fernando Gatica, Alejo Desértico y Alejandro Pezoa conformaron una agradable y pacífica actividad, dando vida a una potente, reflexiva y conversada tarde donde el escenario natural fue la ribera del río Huasco.
Como consecuencia, fue fortalecido el compromiso de los y las asistentes por la defensa del Valle del Huasco, asegurando que somos semillas y que detrás de cada persona hay familias, esperanzas y anhelos por y para preservar un Valle del Huasco limpio, seguro y sustentable para habitar. “Si es necesario, defenderemos con la vida el río que mantiene fértil la última frontera verde del desierto”, declararon.
POR LA DEFENSA DE NUESTRO TERRITORIO, HABITANTES DEL VALLE AUTOCONVOCADOS!
Domingo 31 de marzo de 2019.
Fuente: El Ciudadano.