De las 101 cuencas existentes en el país solo 25 contaban con datos suficientes y comparables, señalan los autores. De estos ríos, nueve están sometidos a tal estrés que se consume el 40% o más del agua disponible.
Los ríos de la zona norte, como San José, Loa, Socompa, Salado, Los Choros o Quilimarí, bajan prácticamente secos, con cantidades de agua situadas en torno a 0,01 y 1 m3 /segundo, que contrasta con los 3.480 m3 /s de los ríos en las regiones de Aysén y Magallanes, en el sur.
En ríos como Los Choros (Coquimbo, norte) o La Ligua (Valparaíso) la magnitud de la brecha es de 824% y de 129%, respectivamente. Esto supone que el consumo ha agotado las cuencas y se están secando las napas subterráneas.
Sin embargo, en zonas como la región de Antofagasta no hay información respecto de la disponibilidad del recurso subterráneo.
De seguir el aumento de temperaturas y la falta de precipitaciones que sufre el país, parece imposible que los sectores agrícola y energético puedan sostener la actual producción, en particular las producciones localizadas en torno a los cauces de los ríos Los Choros, la Ligua, Limarí, Petorca y San José, advierte el documento.
Para el sector hidroeléctrico, las cuencas más vulnerables son las de los ríos Maule y Biobío, en el centro-sur del país, agrega.
fuente: 24 Horas