Sus resultados no fueron considerados en la decisión que adoptó el Comité de Ministros la semana pasada, en la cual dio el visto bueno a la construcción de un embalse de 13 mil hectáreas en la falla activa Liquiñe-Ofqui.
Una hasta hoy muy poco conocida investigación de dos de los principales sismólogos de Chile fue difundida esta semana, dando cuenta de los altos riesgos sísmicos asociados a la construcción de la represa río Cuervo de Energía Austral, controlada por la minera Glencore. Esto, a una semana que el Comité de Ministros diera el visto bueno, prácticamente sin condiciones, a la construcción del embalse de 13 mil hectáreas sobre la falla activa Liquiñe-Ofquie, en las cercanías de Puerto Aysén, en la Patagonia chilena.
Se trata del documento “Estructura sísmico tectónica de la región de Aysén, en el sur de Chile, inferida de la secuencia del terremoto de Aysén de 2007 de Mw=6,2”. Este paper fue elaborado en el año 2012 por el actual director del Centro Sismológico Nacional de la Universidad de Chile Sergio Barrientos, junto a los investigadores Denis Legrand, Hans Agurto, Andreas Rietbrock y Klaus Bataille.
Luego de dar cuenta de los datos recopilados e investigaciones de campo, los científicos afirman que “recientemente, en mayo de 2012, las autoridades chilenas aprobaron la construcción de una central hidroeléctrica en el río Cuervo, en la ribera norte del fiordo Aysén. Esta estructura será construida en el área de la secuencia del terremoto de 2007, sobre la falla Liquiñe-Ofqui y cerca del volcán Macá”. Por tanto, “la represa estará expuesta a significativos riesgos geológicos que incluyen actividad volcánica, terremotos en el sistema de la falla activa y remoción en masa (deslizamiento de cerros) con la potencial inducción de tsunamis localizados, que podrían afectar las área pobladas cercanas”.
Agregan que “otro proyecto (central Cóndor, también de Energía Austral), que contempla la construcción de una represa en el área sur del fiordo Aysén, estaría expuesto a similares condiciones”.
En este sentido, revelador es que señalen que “la secuencia completa de terremotos del año 2007 en el fiordo Aysén y sus cientos de deslizamiento de tierra y el tsunami, revelan que es imperativo re estimar los riesgos geológicos de esta región de Chile que, originalmente, fue considerada como “sísmicamente tranquila”.
Se informó desde las organizaciones que esta investigación y resultados serán presentados ante los tribunales ambientales como muestra de la deficiente evaluación e irregular aprobación del proyecto río Cuervo.