Luego de un intenso debate entre el ministro de Medio Ambiente Pablo Badenier y los parlamentarios, el pasado 5 de agosto se decidió postergar la decisión para la sesión del próximo miércoles.
Complejo ha sido para la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara de Diputados lidiar con el restrictivo texto que el Ejecutivo (que busca solo proteger por ley los glaciares emplazados dentro de parques nacionales) presentó para sustituir la propuesta parlamentaria original que pretendía una salvaguarda general por su carácter de reserva de agua dulce. El debate originado apunta al corazón de la Ley de Protección de Glaciares.
El miércoles 5 de agosto, luego de una intensa discusión, nuevamente se postergó la votación del concepto de “reserva estratégica glaciar” propuesto por 18 diputados, que busca reconocer el carácter de reservas de agua dulce a todos los glaciares ya catastrados por la Dirección General de Aguas (DGA) e incluidos en el inventario nacional del organismo. El debate trasparentó con claridad la negativa del ministro de Medio Ambiente Pablo Badenier a proteger todos los glaciares, con excepción de aquellos que están en parques nacionales, que por lo demás ya están protegidos.
La indicación del gobierno deja en total desprotección los emplazados en las regiones de Atacama, Coquimbo, Valparaíso, O’Higgins, Maule y la Metropolitana, pues ninguno de los 4.200 glaciares existentes en esas zonas se ubica dentro de un parque nacional. Además, son los territorios que cuentan con una mayor población y los más altos niveles de estrechez hídrica. Tal es el motivo por el cual precisamente la protección de sus reservas glaciares es un factor clave de respaldo y seguridad para el acceso al agua.
En la ocasión el ministro de Medio Ambiente, Pablo Badenier, ahondó en la postura del Ejecutivo para rechazar que todos los glaciares del inventario nacional de la DGA sean resguardados, argumentando que “los diputados señalan que son reserva estratégica glaciar aquellos que representan una reserva hídrica relevante y en el segundo (inciso) plantean que todos los glaciares de Chile son reserva estratégica glaciar, entonces se asume que todos son una reserva hídrica relevante, lo que no necesariamente es así o al menos no existe la información disponible para hacer esa aseveración” indicó. También cuestionó que sean los tribunales ambientales los responsables de resolver las reclamaciones sobre la categoría de “reserva estratégica” para la protección de estos cuerpos de agua, ya que “si a alguien no le gusta que vaya a los tribunales ambientales y estos, sin información, van a terminar decidiendo” sobre esta calificación.
El diputado Daniel Melo (PS) contra argumentó recordando al titular de Medio Ambiente que fue el propio gobierno el que relativizó la protección general de los glaciares que contenía la propuesta parlamentaria. “Nosotros hemos venido a plantear acá que todos aquellos glaciares que están inventariados se presume que son reserva estratégica glaciar y que hay un procedimiento de reclamación frente a los tribunales ambientales, para que eventualmente si la industria quisiera desafectar los glaciares o quisiera algún tipo de intervención, que vaya al tribunal ambiental y que fundamente” para desafectarlos de su condición de reserva de agua. Explicó que esto pondría el peso de la prueba y los costos de los estudios para la fundamentación sobre la industria que pretenda intervenir un glaciar y no sobre el Estado que debería propiciar su preservación, aplicando un enfoque precautorio y preventivo.
En la misma línea, el diputado Patricio Vallespín (DC) puso en duda lo propuesto por el Ejecutivo pues a excepción de los glaciares que están en parques nacionales, los demás tendrían que estudiarse uno a uno para determinar cuáles serían declarados “reserva estratégica glaciar”, pero para ello el gobierno no destina recursos para los estudios pertinentes. “Tal como está el proyecto nada garantiza que sea un instrumento que realmente sirva para poder ir avanzando en aumentar los glaciares bajo protección” explicó. Y aunque exista el procedimiento, nada asegura que este “alguna vez se va a activar, si alguna vez va a ir aumentando la superficie de protección o quién tiene que velar o poner los recursos para poder decir qué entra y qué no entra….. si lo va a hacer el Ejecutivo, en ninguna parte aparecen platas con respecto a eso en este proyecto”.
En la ocasión, algunos parlamentarios plantearon la necesidad de convocar a expertos que aclaren dudas con respecto a este tema en particular, lo cual generó cierta controversia por la incidencia de las organizaciones de la sociedad civil en el debate. En paralelo, el propio Ministerio de Hacienda ha accionado para evitar al máximo la protección de los glaciares, en sincronía con los planteamientos del Consejo Minero. De hecho el economista Jorge Valverde, integrante del equipo del subsecretario Alejandro Micco, participa constantemente en las sesiones de la comisión donde se discute este proyecto de ley.
La próxima cita será el miércoles 12 de agosto, donde se espera se pueda zanjar tanto la figura de cuenca glaciar como la definición de “reserva estratégica glaciar”, la cual se entiende como el corazón de la iniciativa legislativa.