El controlador de Colbún sostiene que para construir las centrales en Aysén «se requiere un consenso político y social», el cual a su juicio «no existe». «Espero que la política de acuerdos en este país resurja», lanza Matte, quien agrega: «Probablemente vamos a seguir dependiendo del carbón». «Espero que la política de los acuerdos resurja en este país». Bernardo Matte Larraín es categórico. Controlador del grupo, junto con sus hermanos Eliodoro y Patricia, hace un llamado a las distintas fuerzas para que lleguen a un consenso para avanzar en una política energética para el país. Los Matte participan en sociedades como CMPC, Entel, Banco Bice y Colbún. En la eléctrica son socios de Endesa en el proyecto Hidroaysén, que considera una inversión de unos US$4.500 millones para construir una serie de centrales hidroeléctricas en Aysén. La iniciativa ha tenido una serie de trabas. Tanto, que los Matte decidieron hacer pública su postura a mediados del año pasado a través de un hecho esencial de Colbún, firmado por Bernardo Larraín Matte, hijo de Patricia y presidente del directorio: «Mientras no exista una política nacional que cuente con amplio consenso y otorgue los lineamientos de la matriz energética que el país requiere, se estima que no están dadas las condiciones para desarrollar proyectos energéticos de esta magnitud y complejidad». Pero la situación no ha cambiado. Aún se está a la espera que el Comité de Ministros resuelva las reclamaciones presentadas tanto por la empresa como opositores a la aprobación ambiental del proyecto. La iniciativa hidroeléctrica lleva más de dos años a la espera de una definición luego que el 9 de mayo de 2011 obtuviera el permiso definitivo por parte de la autoridad ambiental de Aysén. El motivo del retraso tendría relación con el elevado número de observaciones contenidas en los 35 recursos de reclamación que ha recibido el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA). «Estamos esperando», dice Bernardo Matte a PULSO, no obstante, insiste en que este proyecto debe tener un consenso político para salir adelante. ¿Cree que el próximo gobierno podrá lograr un acuerdo en esta materia? -Ojalá. Mientras antes se llegue a un acuerdo mejor. ¿Pero un próximo gobierno como el de Michelle Bachelet podría aunar posiciones para definir una estrategia energética? -No lo sé, pero ellos van recién ahora a entregar el programa, y vamos a ver si hay algo en el tema energético, pero por ahora… ¿Cree que el empresariado está atento a que exista una mayor definición en esa área en el programa de Bachelet? -Espero que la política de acuerdos resurja en este país. Dado el actual escenario la matriz energética sigue carbonizándose. -En este minuto no hay ningún proyecto hidroeléctrico entrando al sistema que pueda revertir esta situación. Salvo el proyecto hidroeléctrico de Angostura de Colbún, que es lo único que se ha construido relativamente grande y que entrará ahora en enero. Sí, pero un dictamen de tribunales señalaba que el embalse debía disminuir su cota de llenado. -Hubo un dictamen por un tema externo que paró el llenado del embalse hasta que se aclarara una cosa muy específica, y que se solucionó en cuatro días. ¿Eso da cuenta del nivel de judicialización que han llegado a tener los proyectos de generación en Chile? Tienen la aprobación ambiental, pero igual se pueden frenar. -Más allá del nivel al que se ha llegado, esas son situaciones puntuales que se producen en estos proyectos grandes, pero es un tema que está en desarrollo y hoy el embalse se sigue llenando. ¿Era previsible dentro del equipo técnico de Colbún que esto ocurriera? -No, no era previsible porque creemos que las personas que hicieron la demanda no tienen razón. ¿Cómo ha afectado concretamente la paralización del llenado del embalse? -Paró por una semana el llenado del embalse. ¿Eso generó costos que no tenían asumidos? -No, pero si se prohibe el llenado del embalse por un período de meses sí. Cuatro a cinco días no afecta. ¿Esto se podría volver a repetir? -El recurso está en manos de los tribunales y son éstos los que tienen que fallar. Uno no puede prever lo que van a hacer los tribunales. Es decir, ¿no los podría complicar más adelante este recurso? -Espero que no, porque estamos muy ciertos de haber hecho las cosas bien y hemos puesto mucho empeño para hacer este proyecto de la mejor manera. Hasta ahora lo hemos construido y está prácticamente hecho; está en la etapa final. Estamos muy tranquilos del futuro en ese proyecto, pero es el único proyecto (hidroeléctrico de mayor tamaño) que se ha hecho, por lo que probablemente vamos a seguir dependiendo del carbón. La ministra de Medio Ambiente ha adelantado que el Comité de Ministros se reunirá finalmente antes de que concluya el mandado de la actual administración para analizar las respuestas del proyecto HidroAysén. ¿Cómo evalúa este anuncio del Ejecutivo? -Hay que esperar la decisión. Nosotros no sabemos cuál va a ser la determinación final. Estamos esperando todavía. ¿Esa reunión marcará un precedente en la industria? -No, porque es nuestra institucionalidad ambiental la que supone esto. Sí, pero se han tomado bastante tiempo en reunirse. -Se ha demorado bastante, pero es un proyecto complejo. Ahora, éste no ese el punto fundamental. Nosotros estamos esperando que ojalá este proyecto lo apruebe el Comité de Ministros, pero no sabemos nada. Pero por otro lado, insisto, este no es el tema de fondo. ¿Y cuál es el tema de fondo? -Nosotros hemos dicho públicamente -por hechos esenciales- que para poder construir un proyecto de la magnitud de HidroAysén se requiere un consenso político y social al respecto y eso no existe. Por lo tanto, con o sin fallo del Comité de Ministros el proyecto está parado y va a seguir parado. ¿En qué fundamenta esta afirmación? -Creemos que para hacer un proyecto de esta naturaleza -cuando son proyectos muy importantes- se requiere un consenso de política energética en el país. Hace un año, un grupo de empresarios y el gobierno se reunieron para impulsar una agenda energética. ¿Hubo avances concretos tras esta cita? -Todo eso quedó en nada . ¿Por qué cree que no hubo avances, pese a que hubo disposición al diálogo? – No lo sé, yo no soy responsable de lo que hace el Ejecutivo. ¿Hubo responsabilidad del empresariado? – No, este es un tema que para mí no está en el empresariado, está en el gobierno y en la clase política. Por otro lado, ¿cuáles son los beneficios que generará una matriz que vaya desde Arica a Chiloé con la unión del SING y SIC? -Nosotros no estamos en el norte, pero me parece muy bien que se logre la interconexión. Me parece que se va a hacer. ¿Eso demuestra que se ha avanzado en una política nacional de energía? -No, pienso que sigue todo igual de mal. No se ha sabido nada aún en público. ¿Se ha avanzado después de prácticamente cuatro años del actual gobierno en una política energética pública ? -No se ha avanzado. Eso se debe a todo lo que hemos visto. Todavía no hay un consenso en cómo el país quiere desarrollarse en materia de política energética. ¿Qué falta? ¿Que se pongan de acuerdo los políticos? -Sí, evidentemente es un tema que corresponde al área política. ENERGÍA AL ALZA La mayor generación hidroeléctrica ha generado en las últimas semanas importantes bajas en los costos de la energía en el Sistema Interconectado Central (SIC). En los primeros días de septiembre, el costo marginal, que refleja las transacciones de energía en el día, llegó a los US$ 252 por MWh. Sin embargo, días después y hasta hoy los precios han bajado de los US$100 por MWh. Bernardo Matte confirma esta situación, pero dice que es temporal y la atribuye a los deshielos. ¿Cómo les afecta como empresa la caída de los costos marginales? -Ha bajado en este minuto el costo en el spot, pero es una cosa muy circunstancial por los deshielos. Los costos marginales los vamos a volver a ver altísimos en quince o 30 días más. Ha bajado solamente por un fenómeno circunstancial de un enorme deshielo que se ha adelantado. No es que haya llovido más o que haya más nieve, simplemente se adelantó el deshielo por el calor. Eso ha provocado que caigan los costos marginales al haber más agua. Esto va a durar como máximo hasta fines de noviembre, cuando probablemente volvamos a tener costos marginales muy altos sobre los US$100 por MW. Hoy el costo es menor que eso. ¿Cuál es el grado de avance del proyecto para la instalación de un terminal de Gas Natural Licuado (GNL) en la Quinta Región? -Está avanzando lentamente, pero siguiendo su rumbo. Eso sí, todavía no se puede decir nada. ¿Existe algo más concreto respecto a esta iniciativa que podría abrir otras oportunidades a Colbún? -Es un terminal de Gas Natural Licuado flotante que está definiéndose. Tenemos un acuerdo con Gener para hacerlo de manera conjunta. ¿La ubicación la han definido? -Está, pero todavía… Una idea que se planteó tras la junta de accionistas de CMPC d principios de año es la oportunidad de realizar un proyecto de generación conjunta con Colbún. -En eso no hay nada. CMPC ha desarrollado sus proyectos de cogeneración propios y ya están hechos.